El Aceite de Oliva Virgen Extra (AOVE), conocido como el “oro líquido” del Mediterráneo, es mucho más que un ingrediente: es un aliado para tu bienestar y para realzar el sabor de tus platos. Incorporarlo en tu cocina diaria no solo mejora la calidad de tus recetas, sino que también contribuye a una alimentación más saludable
Grasas saludables: contiene ácidos grasos monoinsaturados que ayudan a cuidar el corazón y reducir el colesterol malo.
Antioxidantes naturales: rico en polifenoles y vitamina E, que protegen las células del envejecimiento.
Versatilidad culinaria: ideal para saltear, aliñar ensaladas, preparar vinagretas o terminar platos con un toque aromático.
Digestión equilibrada: favorece la absorción de nutrientes y mejora el tránsito intestinal.
Tradición y sostenibilidad: su producción respeta el medio ambiente y conecta con la identidad mediterránea
Sofritos y guisos: base de recetas como paella, lentejas o estofados.
Aliños frescos: un chorrito sobre ensaladas, verduras al vapor o pescados a la plancha.
Marinados: perfecto para carnes y pescados, aportando aroma y suavidad.
Repostería saludable: sustituye mantequilla en bizcochos y panes mediterráneos.
Usa siempre Aceite de Oliva Virgen Extra de primera presión en frío.
Consérvalo en envases oscuros y frescos para mantener sus propiedades.
Prefiere variedades locales para apoyar la producción sostenible.
